En la recta final de la X legislatura autonómica, el trabajo se amontona en las Cortes de Aragón y amenaza con colapsar la actividad parlamentaria con el inicio de la tramitación del proyecto de ley de Presupuestos para 2023. El reglamento de la Cámara establece que el debate presupuestario tiene prioridad sobre otros proyectos en tramitación. En consecuencia, teniendo en cuenta que la Cámara se disolverá previsiblemente a principios del mes de abril y que el debate de las cuentas autonómicas se va a prolongar hasta finales de diciembre, sus señorías apenas van a disponer de tres meses escasos para debatir y aprobar definitivamente los 16 proyectos de ley que se encuentran actualmente en fase de discusión, algunos de los que el cuatripartito ha hecho bandera, como son las leyes sobre juego, protección y modernización de la agricultura familiar, dinamización del medio rural, protección civil y vivienda. Toda una proeza casi imposible de cumplir por los ajustados plazos parlamentarios, por lo que una parte importante de esas leyes se quedará por el camino.
El PSOE, no obstante, confía en que verán la luz verde definitiva “la mayoría” de proyectos de ley en tramitación. El portavoz del grupo socialista, Vicente Guillén, asegura que los grupos que apoyan al Ejecutivo “vamos a forzar la máquina para salgan una parte importante, sobre todo los están debatiéndose en ponencia”. Guillén no se atreve a pronosticar cuáles se salvarán de la quema, teniendo en cuenta que a partir de enero se celebrarán entre cinco y seis plenos.
Esta es la situación de los 16 proyectos de ley, entre ellos el del juego:
Juego
Entró en la Cámara en mayo de 2021. Este proyecto de ley, que pretende incrementar la protección de los colectivos más vulnerables y la prevención de la ludopatía, delimitando la apertura de locales a no menos de 300 metros de colegios, es el más complejo y el que más debate interno está generando en el cuatripartito porque afecta a muchos intereses contrapuestos. De ahí que su tramitación se esté dilatando más de lo previsto. Una vez finalizado el pasado mes de febrero el plazo de presentación de enmiendas y celebrado ya el proceso de comparecencias de representantes afectados por la iniciativa, su discusión está ahora paralizada. Hay serias dudas de que una de las leyes estrella de la consejera de Presidencia, Mayte Pérez, pueda aprobarse en esta legislatura. eldiario
